¿¡ Pero qué infesto excremento de macaco sifilítico es esto !?

Para los checos de "Bohemia Interactive", pilotar helicópteros, ya sean comerciales o de combate, debe ser muy divertido gracias a los porros de Avecrem que se fuman, pero la realidad dista bastante de sus fantasías.

Porque, chaval, si no tienes licencia de piloto, los tutoriales de este juego se te harán insufribles. Que si el cíclico, que si el colectivo, que si el estárter, que si mira la batería, que si mira las cervezas de la nevera, que si están infladas las ruedas, etcétera. Lo que vendría a ser el trabajo del mecánico de los c0jones.

Una vez sentado y a los mandos de uno de estos cacharros, te faltarán tres o cuatro teclados y dos o tres joysticks para saber cómo narices se enciende el motor. Para qué te va a indicar el tutorial las teclas que tienes que pulsar, ¿verdad? O peor aún, que te lo indique, porque te bombardeará con toneladas de texto. Y lo que es aún más grave, ¿para qué quieres iniciar el vuelo con tu helicóptero cuando los escenarios que vas a contemplar carecen del más mínimo esfuerzo por parte de los diseñadores?

Porque esa es otra. Escenarios que aparecen a trompicones, texturas que cargan sobre la marcha, sombras que aparecen y desaparecen, suelo borroso (creerás que sufres miopía) o un framerate inestable y bajo a pesar de tener un ordenador que supera con creces lo recomendado, son algunas de las lindezas ideadas por los chicos de "Bohemia". De hecho, tu CPU y la GPU pueden morir por achicharramiento dada la mala optimización del juego. ¿Es que se han vuelto tontos esta gente?

Y ello por no olvidar las insufribles cargas (lentas, estáticas, traídas de la época de la PSX) y unos controles que, por momentos, pensarás que han sido programados para hacerte perder los nervios.

Con respecto al apartado sonoro, y dado el poco tiempo que le he dedicado, no puedo decir nada especial. Lo poco que he escuchado me ha parecido paupérrimo, sin chicha ni manteca por ninguna parte.

El juego tiene las voces en inglés, las cuales agradezco que no hayan sido dobladas al español, ya que, para escuchar la historia de mi3rda que nos endosan, casi que es mejor no enterarse. Como lo hagas, preferirás taladrarte el oído con un torno de dentista. Porque, ¿qué tipo de argumento es ese en el que un payaso de chichinabo tiene que heredar una empresa de helicópteros porque el lerdo de su hermano va y se estrella delante suya? Todo ello relatado mediante una intro aburrida, petarda y que da motivos para buscar el menú y salir del juego.

Mira, vamos a ser sinceros: si te gustan los simuladores de helicópteros, sácate una licencia de verdad, paga por ella y cómprate un helicóptero. De los de verdad. Pero no juegues a esta 1mbecilidad programada por gente de Europa del Este a quienes debiésemos cerrar las fronteras por su alto grado de cretin3z suprema.

Lo que tienes entre manos no es un simulador de helicópteros. Tampoco es un simulador para estrellar helicópteros. Es una cosa rara que han hecho tirando de un motor gráfico ya existente y que no parece gustar a nadie.

Señores de "Bohemia", si hubiese pagado por esta aberración, ya estaría exigiendo el reembolso de mi dinero (Steam da esa opción si se cumplen condiciones, por lo que no sé a qué esperáis para hacer uso de ella). Más aún, estaría exigiendo una indemnización por daños y perjuicios, porque menudo daño y menudo perjuicio que provocáis en la mente de los compradores tras descubrir que este bodrio... ¡¡ ocupa 17 GB de disco duro !! De hecho, pediría una indemnización por cómo me habéis hecho perder el tiempo.

La OMS debería incluir este juego entre las enfermedades profesionales reconocidas, para que así ningún betatester de este juego tenga que quedarse sin pensión de invalidez cuando decida sacarse los sesos por la nariz con la punta de un cuchillo.

Si tienes algún enemigo, regálale este truño. Yo lo hice ^^

Con cariño para Millenia, el lamelorzas comemingas negras.

PD: Residencia la encarnación y san josé de Cájar = NO RECOMENDADOS