Install Steam
login
|
language
简体中文 (Simplified Chinese)
繁體中文 (Traditional Chinese)
日本語 (Japanese)
한국어 (Korean)
ไทย (Thai)
Български (Bulgarian)
Čeština (Czech)
Dansk (Danish)
Deutsch (German)
Español - España (Spanish - Spain)
Español - Latinoamérica (Spanish - Latin America)
Ελληνικά (Greek)
Français (French)
Italiano (Italian)
Bahasa Indonesia (Indonesian)
Magyar (Hungarian)
Nederlands (Dutch)
Norsk (Norwegian)
Polski (Polish)
Português (Portuguese - Portugal)
Português - Brasil (Portuguese - Brazil)
Română (Romanian)
Русский (Russian)
Suomi (Finnish)
Svenska (Swedish)
Türkçe (Turkish)
Tiếng Việt (Vietnamese)
Українська (Ukrainian)
Report a translation problem
Tras la batalla de Kursk a mediados de 1943, los Panzer demostraron que habían perdido su superioridad ofensiva y debían utilizar la defensa, coordinándose con las otras fuerzas. Las últimas tentativas de la Blitzkrieg ocurrieron en la batalla de las Ardenas.
Acompañadas por aviones Stuka y tropas motorizadas, las Panzerdivision consiguieron invadir los Países Bajos, Bélgica y Francia en apenas dos meses. En el Frente Oriental, la Wehrmacht alcanzó las puertas de Moscú durante la campaña de 1941. Unidades de infantería pesada o móvil eran usadas junto a cañones de asalto para dar apoyo a las divisiones blindadas de la Wehrmacht.