Llevaba esperando mucho tiempo un Resident Evil de verdad. Cuando digo “de verdad”, me refiero a un juego donde el terror se presente en su máxima expresión, donde una bala te pueda salvar una vida o donde tengas que buscar por todo el escenario algo con lo que sobrevivir. Para mí, la saga Resident había muerto después del 4, donde la acción se volvió más importante que la supervivencia y el sigilo. Cierto es que, con Resident Evil Revelations 2, volví a recordar lo que fue la saga, pero entonces llegó el anuncio de Capcom de un Resident Evil en primera persona, un golpe de tuerca que no se sabía muy bien cómo iba a salir. Es cierto que tuve mis dudas, pero desde el primer minuto sentí lo que no había sentido en más de 10 años. Comencemos.

Mientras que los controles tanque de otros juegos de la saga se utilizaban para dar miedo a través de una sensación de impotencia, nuestra lucha contra los Baker por salvar a nuestra novia Mia, lleva ese miedo al terreno de lo psicológico. Liberado en mis movimientos, ahora podemos explorar fácilmente la mansión, temerosos de lo que hay a la vuelta de la esquina. ¡Esa vista en primera persona nunca le había sentado tan bien a un juego!

Capcom ha sabido transmitir el terror sin grandes parafernalias. Simplemente con el apartado sonoro ya sentimos miedo y, así, ruidos aparentemente inocuos de repente se convierten en el más aterrador de los lamentos. Han sido muy inteligentes en la forma de asustar al jugador. El juego no se limita al recurso del susto barato, como esas películas de terror que se sirven de subir el sonido a tope y soltar un grito o un ruido desagradable. Aquí no, cada ruido de la casa, crujido de madera, viento, o nuestros propios pasos retorcerán nuestra mente. Mientras recorremos la mansión de los Baker, diseñada de una manera magistral, habrá momentos en los que tendremos tranquilidad mientras esperamos sustos que no llegan, y momentos en los que parece que ya está todo tranquilo y nos dará un vuelco al corazón.

La primera hora RE7 es como estar en una película de terror adolescente de los 80, pero de la mejor manera posible. El resto es una oda a la saga de los primeros años.

Una nueva mecánica de combate es la capacidad de Ethan de bloquear. El bloqueo reduce significativamente el daño recibido de los ataques. Con los anteriores RE la mejor estrategia ante un combate desigual era darte la vuelta y correr. Ahora dar la espalda no es muy buen consejo cuando te van a dar un golpe, ya que te vuelves muy vulnerable, por lo que es más estratégico absorber el golpe antes de huir.

El juego tiene muchos guiños que harán las delicias de los fans de la saga, desde las hierbas de curación hasta el mismo sonido que hacen los botones de un teclado. Esta claro que el juego se ha hecho con el mimo que la franquicia merece.

Todo esto se complementa maravillosamente con el apartado gráfico. Es un paso adelante de la saga y un espectáculo visual en todos los sentidos. Texturas, juego de sombras y, sobre todo, la iluminación. Es una autentica gozada.

El doblaje, completamente en castellano, es de cine, y la historia y su forma de contarla es lo que siempre fue esta saga en sus primeros años, absolutamente magistral. Desearemos investigar cada rincón de la casa y sus alrededores en busca de recortes de periódicos, diarios y demás información para saber más de lo que ha pasado.

Antes de terminar, no me quiero olvidar de la VR. Capcom ha traído como exclusiva temporal a Playstation VR el juego, así que para hacer el análisis lo estuve probando y mi experiencia no ha sido muy buena. A pesar de tener unas cuantas configuraciones para todo el mundo, incluyendo un modo suave para que no maree tanto. Tengo que decir que a mí se me hizo injugable en muchos momentos. Hay varios problemas jugando con VR que empañan absolutamente la experiencia. En primer lugar es la calidad gráfica, que como es normal baja hasta límites insospechados, incluso en Ps4 pro. Igual fue fallo mío el probarlo primero normal y luego en VR, pero para mí, la cuesta para superar ese cambio es bastante empinada; además, debido a la mecánica de movimiento, se hace frustrante en muchos casos -como en muchas secuencias- donde Ethan va a su puta bola y no reacciona de la forma que tiene que hacerlo a tus movimientos de cabeza, resultando una experiencia bastante incómoda. Es cierto que la inmersión es brutal y hace que prácticamente estés ahí en cada momento, dando bastante más miedo que jugando normal, aunque es verdad que muchos de los sustos son porque lo borroso de la imagen no te deja ver muy bien lo que tienes delante. Mi consejo: Si tenéis VR id alternando el juego en su versión normal y VR, dependiendo de cada momento.

Sobre la duración del juego, yo lo he terminado en poco más de 8 horas, pero me he dejado por el camino multitud de coleccionables, además el juego cuenta con un final alternativo. Me imagino que para terminarlo al 100% harán falta mínimo 15 horas, una duración más que correcta para juegos de este género.

En definitiva, después de pasar varios años anhelando un Resident Evil a la altura, se puede decir que Capcom lo ha conseguido, la primera persona le sienta de maravilla y tenemos un juego que se siente nuevo, fresco, con toques inconfundibles de la saga. Sus constantes cambios de ritmo entre acción intensa, puzzles, sigilo y terror hacen que sea uno de los mejores survival horror que he jugado en mucho tiempo. ¿Es el mejor Resident Evil? Quizás no, pero está muy cerca.