ElTitoDan 最近的評論

Una opción excelente para echarse unas partidas con amigos, desconocidos o por tu cuenta. Aunque el bucle de jugabilidad se vuelve evidente a las pocas horas, los mapas aleatorios y el sistema de progresión dan para mucho, mucho rato.

Aun siendo mi primer juego de exploración de mazmorras en primera persona, me ha encantado, e incluso diría que es de lo mejor que he probado de esta desarrolladora.

El combate es rápido pero tiene su chicha; influyen mecánicas que dan mucho juego a cada batalla y que se explican muy bien. Si pasas de ellas vas a acabar mordiendo el polvo incluso en encuentros de bajo nivel, pero si no, tus contrincantes van a conocer lo que es una auténtica pesadilla.

Que no te engañe el estilo moé de los personajes principales; la historia tira para lo turbio y tus enemigos vendrán en forma de un variado ejército de horrores lovecraftianos. Y aun así, este choque estilístico tiene un encanto que solamente aporta a una narrativa que ya de por sí te mantiene en vilo hasta el final.

La única pega que puedo sacarle, y con más razón por lo buena que es la actuación, es que las voces en inglés son muy escasas. Cuando marcas la opción, casi todos los diálogos aparecen en silencio. En mi opinión, podrían al menos haber incluido una opción mixta. Y en cuanto al port, he visto a mucha gente quejarse de errores, pero a mí no me ha crasheado una sola vez en las 80 horas que le he echado. También está censurado, pero se puede restaurar todo creando un archivo vacío llamado Minigame.dat en la raíz del juego.

Si es de tu estilo o simplemente eres capaz de tolerar las batallas por turnos, adelante con todo, porque a decir verdad, es un juegazo con todas las de la regla.

Dishonored es un juego de sigilo y acción ambientado en una ciudad industrial azotada por la peste.


El jugador se pone en la piel de Corvo Attano, el guardaespaldas real, tras ser injustamente acusado de asesinar a la emperatriz. Es por ello condenado a muerte, pero poco antes de su ejecución, un misterioso remitente le presta su ayuda.

El propio trascurso de la trama puede parecerle plagado de clichés a algunos, pero donde realmente brilla es en su worldbuilding. El propio diseño de los mapas y el lore encontrado en libros y notas va complementando a trocitos la historia principal a medida que juegas.

Lo único que cambiaría en este apartado sería cómo se presenta el final del juego. Un corte abrupto a una secuencia de minuto y medio que se puede resumir en "vivieron felices y comieron perdices" o "la has cagado aún más de lo que estaba" me parece bastante anticlimático.


Si tuviese que resumir el gameplay, diría que es una mezcla entre Hitman (2016) y Dying Light con magia.

El juego se estructura en una serie de misiones donde debes atravesar un nivel y neutralizar a un objetivo del modo que tú creas conveniente. Los mapas son lineales y se ramifican tanto vertical como horizontalmente, ofreciendo siempre varias formas de atajar sus obstáculos.

Puedes pasártelo emulando a un fantasma o bien masacrando a todo dios, y ambas formas son divertidas y utilizan los mapas de forma diferente.

Me ha sorprendido lo bien implementado que está el sigilo para ser un juego en primera persona; nunca he tenido problemas para observar a los enemigos y moverme a través de los niveles. La IA es la típica de un juego de sigilo; los enemigos son algo estúpidos y tienen una ceguera severa, pero moverse sin ser descubierto sigue siendo desafiante.

En cuanto al combate, hay mucha más variedad de poderes y armamento para lidiar con los enemigos de manera letal que sin hacerles daño. Cuando son pocos o los pillas desprevenidos, puede dar la impresión de que tu personaje es invencible, pero te puedes ver en problemas en un santiamén si te dejas ver por muchos de ellos en el lugar equivocado.


Tiene un estilo artístico pintoresco, con personajes esperpénticos pero caricaturescos que reflejan la cruda realidad que se vive en la ciudad.

He visto quejas de la calidad de los gráficos, pero teniendo en cuenta el año en el que salió el juego, no me parecen tan horripilantes como los pintan.


Recomiendo encarecidamente este juego, especialmente si te gusta el sigilo y la exploración.

Como si los dibujos del sábado por la mañana fueran jugables.

Buena jugabilidad, mundos imaginativos y originales, diálogo y voces sorprendentemente entretenidos, muestra sus cartas poco a poco... Aunque el estilo artístico me chocó un poco al principio, terminó por ser un plus.

Tremendo juego y tremendas diablesas.

Valheim es una especie de hijo bastardo entre Terraria y Conan Exiles. Hay una serie de jefes que se deben invocar y aniquilar en un orden concreto utilizando los materiales del anterior, pero el cuándo y el cómo dependen enteramente del jugador. Además, incorpora algunas mecánicas de juegos de supervivencia similares a este último.

Este juego lo venden bajo la etiqueta de "difícil". Si bien es cierto que otros de este tipo logran una sensación de reto y progresión natural, Valheim, lamentablemente, está plagado de mecánicas cuyo único propósito es malgastar tu tiempo y crear frustración.

• Hasta los crafteos más básicos requieren una cantidad ingente de materiales, y muchos de ellos no terminan de calar en la receta. Para la capa de lobo, una pieza de armadura esencial para sobrevivir en la montaña, hace falta un trofeo de lobo, que tiene una probabilidad de un 5% de ser dropeado por lobos, un enemigo de montaña.
  
  Tus únicas alternativas son hacer un largo camino de hogueras (cada una consumiendo combustible continuamente) o crear pociones que tardan dos días en elaborarse para 10 minutos de protección (asumiendo que no mueres).
  
  
• La facilidad para morir. Entiendo que los desarrolladores quieran crear una sensación de inseguridad constante, pero que los enemigos más débiles de un bioma te sigan curtiendo aun llevando la mejor armadura de ese bioma sólo te fuerza a mejorarla (otra mecánica innecesaria) varias veces, lo cual cuesta más material que la propia armadura.
  
  Además, sin mejoras permanentes de vida, la única forma de mantenerse en pie es con buffs de comida constantes. El veneno, que en otros juegos es sólo una molestia, hace unos cuantos segundos de daño constante e ignora la armadura, matándote siempre a menos que puedas tanquearlo con comida cara o tengas otra poción que tarda dos días en hacerse.
  
  
• Para ser un juego en el que muchos enemigos te matan de un toque, las penalizaciones por morir son tremendas. Ya no hablo de soltar todos tus objetos en un sitio potencialmente inalcanzable sin ellos, sino de reducciones de un 5% en el nivel de todas las habilidades cada vez que mueres.
  
  
• Existen muchas restricciones absurdas que impiden un progreso continuo. Por ejemplo, no se puede teletransportar minerales. ¿Por qué? Para obligar al jugador a empezar de cero en otra base a mares de distancia.
  
  
• El consumo de resistencia por cualquier acción, incluyendo tensar un arco, es completamente desproporcionado. La mitad del tiempo de juego se reduce a esperar a que se llene una barrita para poder seguir con lo que estabas haciendo.

Me lo pasé con otras dos personas y, para ser sincero, no puedo decir que fuese una mala experiencia. Sin embargo, podríamos haber conseguido lo mismo en mucho menos tiempo y sin frustración innecesaria. Tal como está, no lo recomendaría demasiado.

No hay mucho que decir. Todo un clasicazo que simplemente es divertido de jugar.

Yakuza 0 es un juego de peleas y mundo abierto ambientado en el mundo criminal de Japón durante los años 80, con una historia dramática pero que, a la vez, no se toma a sí mismo en serio. Se trata de una precuela a Yakuza, pero se puede empezar por esta entrega.

La trama se desarrolla desde dos puntos de vista que se van alternando a lo largo del juego.

Por un lado tenemos a Kazuma Kiryu, un joven yakuza que se unió al crimen organizado para compensar a quien considera su padre adoptivo. Tras cobrar una deuda a golpe de nudillo en una diminuta parcela escondida en el distrito de entretenimiento más grande de Tokio, descubre que su víctima ha sido asesinada por un tercero. Buscado ahora por la policía, no tardará en descubrir la importancia que ese diminuto terreno tiene para la mafia.

Por otro está Goro Majima, un hombre a quien se dio por muerto cuando desapareció en las cámaras de tortura de la yakuza. Liberado por su muestra de determinación, ahora es extorsionado por un superior para encargarse del cabaret más importante de Sotenbori, un distrito de Osaka donde permanece bajo vigilancia de la mafia. Sin embargo, su plan para regresar al mundo del crimen organizado se ve comprometido tras recibir una inusual orden de asesinato.

Cabe mencionar que el juego no se queda corto en cuanto a cinemáticas y diálogos. Aunque no se me hicieron pesadas, considero que se debe comprar sabiendo que las leches se reparten a la par que los muros de texto.

La jugabilidad principal de Yakuza 0 se basa en los combates cuerpo a cuerpo. En ese sentido funciona como cualquier Beat 'Em Up: machacar enemigos a cebollazos hasta que dejen de moverse.

Cada personaje cuenta con tres cuatro estilos de lucha con mucha personalidad y combos sencillos de aprender. Por lo general, el combate es bastante satisfactorio y casi hace gracia lo exageradamente violento que es.

La música es simplemente brutal, y le da una chispa especial a los combates.

SI tuviese que ponerle pegas, la principal serían los stuns y el hecho de que algunos de los movimientos más chulos se tarden tanto en desbloquear que básicamente nadie los pruebe.

También cuenta con dos mapas para explorar. Aunque son algo pequeños, las calles repletas de neón se sienten vivas y ofrecen todo tipo de entretenimiento en cada esquina.

Además de la historia principal, la verdadera firma de la saga son las tramas secundarias. Cuenta con dos grandes historias opcionales en las que el jugador deberá convertirse en agente inmobiliario y gestionar un club de cabaret.

La gente también irá parando a tu personaje por la calle para que les ayudes con sus particulares preocupaciones. Cada una de sus historias da un carácter peculiar a la ciudad.

Por si fuera poco, hay una auténtica barbaridad de minijuegos. Tantos, que es seguro que algunos te gustarán y otros sencillamente los vas a odiar. Tienes karaoke, disco, bolos, arcades clásicos, carreras de coches en miniatura, juegos de mesa orientales, de azar...

• El port es horrible y no tiene soporte. Aunque varía de una máquina a otra, sufre de errores de audio, microstuttering, crasheos y un glitch que sustituye los ítems de tu inventario por otros aleatorios. Personalmente esto último sólo me ha pasado una vez, pero los errores de rendimiento eran constantes.
  
• La cámara no es nada agradable de ver y puede provocar mareos o que tu personaje esquive hacia el lado equivocado.
  
• Nadie me dijo que equiparme la Autobiografía Carismática convertiría a los enemigos en cocainómanos enrabiados.
  
• En mi opinión, el juego glorifica demasiado el crimen organizado. Kiryu y Majima se comportan como personas compasivas fuera de la historia principal, pero sus supuestos ideales chocan completamente con lo que implica el crimen organizado. Se intenta constantemente hacer una distinción entre "buenos" y "malos" yakuza, a pesar de que todos pecan de lo mismo.

Yakuza 0 es cautivador, entretenido y tiene personalidad. Empecé con Yakuza Kiwami hace unos meses y éste me ha parecido una mejora en casi todos los aspectos. La historia, aunque exagerada y cliché en ocasiones, es muy intrigante y hay muchísimo por hacer además de completar la trama principal.

La parte opcional del juego, por su parte, puede no ser tan bonita. Me han gustado muchos de los minijuegos, pero algunos dependen completamente del azar o pueden ser muy difíciles. Completar la lista de la compra al 100% me parece un tedio más que otra cosa.

Recomiendo este juego si sabes a lo que te metes y los problemas que tiene, porque me parece objetivamente bueno.

Lo que Harvest Moon debería haber sido desde el principio, y aun 4 años después de su lanzamiento sigue recibiendo actualizaciones.

The Witcher 3: Wild Hunt es un RPG de mundo abierto para un jugador de dimensiones descomunales, ambientado en un universo medieval ficticio.

En él, tomamos el control del brujo de gran renombre conocido como Geralt de Rivia, un cazamonstruos centenario sin par entrenado desde su juventud y sometido a mutaciones que le otorgan habilidades sobrehumanas. Al inicio de la aventura, nuestro descarado esgrimidor recibe una carta de una antigua amante solicitando su presencia con clara urgencia. Tras ser conducido hasta el corazón de un imperio de analogía otomana, el propio emperador le encomienda una tarea que cambiará el curso de la historia, a cambio, claro está, de una jugosa recompensa.

Nada más comenzar el juego se nos presenta con una vasta llanura al amanecer y un puñado de bestias devoradoras de hombres, las cuales servirán como introducción al combate. Compararlo con el de títulos como Skyrim debería ser considerado una herejía; es una completa gozada y satisfactorio a más no poder. El brujo pelea con dos espadas: una de acero para humanos y otra de plata para monstruos. También hace uso de señales, una serie de conjuros mágicos sencillos que le ayudan en combate, además de una ballesta y bombas alquímicas. Todas estas armas y la existencia de mecánicas como el contraataque y la evasión rápida, junto con unos controles más que decentes y una dificultad desafiante lo dotan de una jugabilidad excepcional.

La historia rezuma con incontables subtramas, misiones secundarias y contratos para eliminar a monstruos de alta peligrosidad. Siendo franco, es larga de narices, especialmente si, al igual que a mí, te llama mirar incluso debajo de las piedras. Para dar una idea general de su duración, mi primera partida en el juego base sin DLCs fue de unas 90 horas, y admito que dejé lugares sin explorar. Tuve que esperar pacientemente a un período vacacional para probarlo porque sabía de sobra que su enorme y compleja trama me iba a absorber por completo.

Cada elección tomada a lo largo de los acontecimientos cobra cierto grado de importancia en el panorama general. El juego ostenta un total de 36 finales menores y 3 mayores, los cuales son accesibles gracias a la tremenda libertad que hay en los diálogos. Aunque si piensas que siempre sabrás qué decir en cualquier situación, te espera una desagradable sorpresa, porque casi todas las decisiones que tomes serán moralmente ambiguas y algunas de las más importantes tienen incluso un límite de tiempo.

Los paisajes y el apartado gráfico son otro aspecto que quiero destacar. Para mí han sido tanto un deleite constante a la vista como una gran pérdida de tiempo debido a los minutos que he dedicado a tomar cientos de capturas de amaneceres desde el ángulo perfecto. El mundo da la sensación de estar vivo y en movimiento a pesar de ser estático en su mayor parte. Puedo afirmar que simplemente las vistas han conseguido transportarme por completo a esta tierra desolada por la guerra.

Dentro del juego hay, además, un juego de cartas completamente independiente. La verdad es que no le hice ni put0 caso durante mi primera partida, y aun así pude superar la historia sin casi ninguna consecuencia. Lo he retomado en mi segundo playthrough y no me ha resultado para nada difícil cogerle el tranquillo. De hecho, como alguien que detesta los juegos de cartas, me ha parecido entretenido. Sin embargo, si no lo pruebas tendrás la sensación constante de que te estás perdiendo algo, puesto que casi todos los mercaderes y posaderos te dan la opción de retarlos a unas rondas de cartas.

Toda obra maestra peca de algo. Éstas son algunas características que creo que detrimentan su calidad.

• Bugs que impiden completar ciertas misiones. La mayoría surgen cuando no se sigue el orden establecido de las tareas o dos de ellas se mezclan en un mismo lugar. Una gran patada en las partes sensibles para los completistas.
  
• Demasiadas cinemáticas. Completamente opuesto a la saga Half-Life y peligrosamente cerca a un juego de Telltale, en The Witcher 3 gran parte de las horas de juego se reduce a observar conversaciones entre los personajes. Para rematar, en ocasiones interrumpen una lucha contra un jefe o un momento importante en el que perder el control de Geralt resulta desconcertante.
  
• Al quitar el límite de fotogramas, el personaje se atasca mucho más en ciertas partes del mapa y algunas señales dejan de ser utilizables. Esto último me obligó a cambiar unos parámetros en un archivo para poder usar el modo alternativo de la señal de axia a 144 fps.

En mi opinión, la aparentemente sobrevalorada fantasía medieval creada por el ahora conocido estudio polaco hace completo honor a su exorbitante reputación. Nada más lejos que un mero juego del montón; es una extensa y completa experiencia que recomendaría a cualquiera dispuesto a desconectar totalmente del mundo real durante una temporada.